No siempre, cuando uno quiere, puede. Hay cuestiones, que no se manejan voluntariamente, porque son inconscientes y aunque en la mayoría de los casos, las personas pretendan desconocer la idea de lo inconsciente, lo cierto, es que su poderosa presencia, provoca efectos en la voluntad de las personas; a tal punto, que aunque se quiera, a veces no se puede.
Esas cuestiones inconscientes, si no se conocen y clarifican, funcionarán como un obstáculo para concretar los deseos personales, y determinarán, a través del fenómeno de la repetición, que las personas se sitúen siempre en el mismo lugar, en una inercia mortífera, sin poder avanzar.
Para no repetir, una y otra vez, la misma situación, el psicoanálisis permite revelar los diferentes móviles inconscientes y ayuda a las personas a que sea posible alcanzar aquella frase que dice: Cuando uno quiere, puede.
Esas cuestiones inconscientes, si no se conocen y clarifican, funcionarán como un obstáculo para concretar los deseos personales, y determinarán, a través del fenómeno de la repetición, que las personas se sitúen siempre en el mismo lugar, en una inercia mortífera, sin poder avanzar.
Para no repetir, una y otra vez, la misma situación, el psicoanálisis permite revelar los diferentes móviles inconscientes y ayuda a las personas a que sea posible alcanzar aquella frase que dice: Cuando uno quiere, puede.
