septiembre 16, 2011

Dependencia o autonomía?



Los padres que sólo atienden la necesidad de sus hijos pero no estimulan el deseo, alientan en ellos un espíritu dependiente, regresivo y endogámico, donde la confusión, la inercia y lo primitivo, adquieren protagonismo.

Esos hijos vivirán acompañados con la idea de enfermedad, fracaso y derrota, y con la pesada convicción, de que la casa de sus padres se ha convertido en un pozo del cual no es posible salir .

En cambio, los padres que enseñan a sus hijos que la vida es una experiencia significativa, que no se reduce a comer y a estar todos juntos en familia, alientan en sus hijos a meterse en un horizonte amplio de alternativas, por fuera de la familia.

Esos hijos vivirán su vida con ideas propias, con imaginación.
Harán de cada lugar un hogar. Serán inquietos, preguntones, cuestionadores, creadores. Llevarán de su mano la osadía de vivir y el coraje de asumir riesgos.
Tendrán una vida feliz porque habrán sabido construir un camino propio, libre y autónomo.