julio 14, 2010

Equivocaciones y falacias de los políticos

Laura María Ventura
Con frecuencia, los políticos, desconociendo las premisas básicas y los descubrimientos científicos del psicoanálisis, y atados a prejuicios, mandatos y tradiciones, dicen y hacen estupideces alarmantes, a la hora de establecer y adoptar, los actos y las decisiones fundamentales para la evolución saludable de una sociedad. Ignorantes de lo esencial, con comprensión intuitiva del comportamiento humano y carentes de sostén teórico científico, condenan a la confusión y al retroceso -por su primitivismo y miopía- a las personas y a la sociedad.
Mi sugerencia: Los políticos debieran desarrollar un interés científico,
con el fin de poder apartarse de enfoques intuitivos y subjetivos y, de este modo,
poder captar y abordar adecuadamente, los diversos y complejos fenómenos de la realidad externa y de la naturaleza humana, en los cuales deben pensar y debatir -de un modo objetivo- para avanzar y llegar a idóneos resultados. El psicoanálisis -como método científico de investigación- se diferencia -por su potencia y sus alcances- de las limitaciones de todas las otras ciencias.
Si los políticos no logran entender esta incuestionable verdad, quedarán entonces, reducidos y encerrados en barreras insuperables y no podrán -ni afirmar ni fortalecer- con pasos decisivos, aquello que -ellos dicen y proclaman- que es indispensable defender. Sin conocer no es posible edificar una relación constructiva con la sociedad.
Quien quiera oír que oiga.