enero 19, 2011


Un golpe a la niñez

Los niños necesitan la atención, el interés y el afecto de sus padres.
No necesitan -ni desean- ser expuestos como mercancías.
Los padres que incentivan este tipo de actitudes en sus hijos; conducen a sus hijos al conflicto, a la soledad, a la tristeza; y -en muchos casos- a la muerte.

Muchos padres -por ignorancia o perversidad- exponen a sus hijos a situaciones tan traumáticas como las que evidencian algunas fotos recientemente reveladas en medios periodísticos o en afamadas revistas; donde niñas de aproximadamente siete años, posan -inexpresivas- con provocativa impostura e inadecuación en vestimenta y actitud. Niñas; que en esa actitud, son empujadas a simular ser lo que no son: mujeres adultas.

La adecuada función parental es: guiar, conducir y sostener a los hijos.
La adecuada función parental -no expone ni manipula- a los hijos como objetos para beneficio de los padres.

En consecuencia -y por lo anteriormente manifestado- afirmo que resulta fundamental; que ante tamaña desorientación, se intente la saludable orientación. Una cosa es una nena que juega a ser grande y otra cosa muy distinta son aquellos padres que colocan a sus hijas en el lugar de objeto y las fuerzan a exhibirse en público para su rédito económico.