
El lapsus, en la intimidad del consultorio del psicoanalista, es un error necesario.
Libera una verdad.
En cambio, en público, el lapsus, en tanto error inesperado e indeseado, exhibe una condena. Aprieta la libertad.
El objetivo de este blog es ayudar a las personas a vivir mejor difundiendo la poderosa capacidad del psicoanálisis como vehículo de transformación personal.